La historia de Mate Cosido, nacido como Segundo David Peralta en 1897 en Monteros, Tucumán, está envuelta en un halo de misterio desde sus primeros años. Con una cicatriz que cruzaba su frente, este personaje se vio envuelto en problemas con la justicia desde una edad temprana, participando en huelgas y enfrentamientos amorosos en su juventud.
«No sabrán de mí, no entregaré mi cuerpo herido, Quitilipi, Machagai… ¿Dónde está Mate Cosido»
León Gieco, Bandidos Rurales
Sin embargo, su fama como bandido se consolidó en el Chaco, donde se unió a Antonio Rossi para cometer robos audaces, desafiando a las autoridades y ganándose el apoyo de los más desfavorecidos. A pesar de su origen tucumano, la leyenda de Mate Cosido se forjó en esta provincia, donde se convirtió en una figura temida y respetada.
Sus hazañas delictivas, como el asalto a trenes y empresas, lo convirtieron en una figura legendaria entre los más pobres, mientras las autoridades lo perseguían sin tregua. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de la Gendarmería Nacional, encabezada por el comisario Guillermo Solveyra Casares, Mate Cosido logró eludir la captura una y otra vez.
La última señal de vida de Mate Cosido fue una carta enviada a la revista Ahora en 1940, donde ofrecía su versión de los hechos que lo llevaron a ser perseguido por la ley. Desde entonces, su paradero sigue siendo un enigma sin resolver, dejando atrás una historia llena de misterio y especulación.
¿Dónde está Mate Cosido? Esta es la pregunta que sigue sin respuesta, manteniendo vivo el mito de este legendario bandido del litoral argentino.